Que Netflix invierta más fuerte por los videojuegos no es casualidad, sino parte de un plan mucho mayor

Cuando uno piensa en Netflix lo antepenúltimo que a uno se le viene a la cabeza es que se trata de una plataforma de videojuegos. Al menos, como Game Pass o GeForce Now. La otra realidad es que de un tiempo a esta parte lo es de manera literal ofreciendo la posibilidad de jugar a la trilogía clásica de GTA, Sonic Mania o Street Fighter y, además, tiene juegos exclusivos. ¿Quiere competir con Nintendo, Xbox y PlayStation? En parte sí, pero no directamente.

Lo que mantiene el gran volumen de suscriptores de la plataforma de vídeo en streaming de referencia son sus series y películas. Eso no tiene ningún misterio. Sin embargo, hasta que aparezcan los próximos fenómenos Stranger Things, Kobra Kai o El Juego del Calamar (todas series que concluyen este mismo año) debe apostar fuerte por nuevas historias capaces de retener al espectador actual. Y ahí entran en juego el anime (con brutal éxito) y los videojuegos.

En la más reciente presentación de resultados de cara a los accionistas y ejecutivos de la compañía, Gregory K. Peters, el codirector ejecutivo, presidente y director de Netflix, dejó claros los planes para revalidar el servicio como una plataforma de videojuegos: tienen experiencia a la hora de crear historias y, además, les permitirá ampliar y mantener el volumen de clientes.

"Vemos la oportunidad de monetización a corto plazo con los juegos de forma muy similar a como lo hemos visto con otras categorías de contenido nuevo. Se puede pensar en guiones, películas, etc.

Eso significa, en esencia, que si aportamos más valor a nuestra oferta, conseguimos una mayor adquisición de usuarios, una mayor retención y una mayor disposición a pagar. Así que impulsa todos los fundamentos fundamentales de nuestro negocio".

De hecho, pese a su tímido arranque, hubo un punto de inflexión de cara al catálogo de videojuegos de Netflix: la entrada GTA Trilogy The Definitive Edition supuso un notable empujón al uso de los juegos desde Netflix en televisiones o navegadores web, además de móviles. Recordemos: para poder jugar no hay que comprar el juego aparte, sino que se incluye con el propio servicio.

Por supuesto, hay que generar un efecto llamada y dirigirse de manera directa a los enamorados de los videojuegos: de un tiempo a esta parte Netflix ha tirado la casa por la ventada produciendo adaptaciones de sagas como Cyberpunk 2077, league of Legends, Devil May Cry, Sonic... ¡Hasta Cuphead!, Además de recibir de manera constante en su catálogo varias de las producciones cinematográficas ya estrenadas. Eso sí, de vez en cuando pincha como ocurrió con Resident Evil.

¿En qué se traducen las palabras de Peters de cara a esa visión de Netflix como plataforma de videojuegos? De entrada, el CEO asegura que se aumentará la inversión en Netflix Gaming y admite que es muchísimo más pequeña que la destinada al resto del contenido del servicio. Sin embargo, también adelanta -recordemos que estas palabras nacen de una junta de accionistas- que no se invertirá demasiado de golpe dado que se tiene que lograr antes un primer hito: que los suscriptores le den el valor adecuado a la iniciativa.

Por lo pronto, no está de más recordar que si tienes una cuenta de Netflix puedes jugar a una edición especial de Civilization VI, la saga Oxenfree o una versión completa y sin anuncios de Dead Cells. Lo cual está muy bien ahora que viene el verano y posiblemente te interese dejar las consolas en casa.

Sin embargo, la pregunta sigue en el aire: ¿qué necesita Netflix para ser el "Netflix de los videojuegos"? Tiene la plataforma y también un catálogo interesante. Lo paradójico aquí es que, aparentemente, lo que ahora necesita que un porcentaje significativo de quienes ya están suscritos jueguen.

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La noticia Que Netflix invierta más fuerte por los videojuegos no es casualidad, sino parte de un plan mucho mayor fue publicada originalmente en Vida Extra por Frankie MB .