por Fayerwayer
18 de julio de 2025
Un acto que, sin lugar a dudas, pasará a la historía: Donald Trump estampó su firma en la Ley GENIUS, el primer gran marco legal para las “stablecoins” en Estados Unidos. La iniciativa busca garantizar reservas, prevenir el blanqueo de capitales y definir responsabilidades ante posibles quiebras, al tiempo que reaviva el debate sobre sus propios intereses en el sector cripto.
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Un reglamento completo para las emisiones de stablecoins
La Ley GENIUS establece con precisión quiénes pueden emitir monedas estables —aquellas vinculadas al valor del dólar u otro activo de referencia— y obliga a custodiar reservas equivalentes al total en circulación. En caso de insolvencia, las entidades deberán seguir procedimientos específicos de liquidación.
Además, para combatir el lavado de dinero, los emisores quedan sujetos a controles de identidades de clientes y a informes periódicos ante las autoridades financieras.
Reacciones encontradas en el Capitolio
En el acto de firma, Trump dedicó palabras de reconocimiento a los ejecutivos de Coinbase y Tether, destacando su “espíritu pionero” tras un periodo que, según él, su antecesor trató de “restringir”.
Sin embargo, el senador Josh Hawley alertó de que la normativa podría beneficiar excesivamente a las grandes tecnológicas, mientras que la senadora Elizabeth Warren la calificó de “insuficiente” y “llena de vacíos” que representarían un riesgo para la seguridad nacional y los consumidores.
Posibles conflictos de interés
El protagonismo de Trump en esta regulación ha reavivado el escrutinio sobre sus vínculos con World Liberty Financial, la empresa familiar detrás de la stablecoin USD1.
Aunque la Casa Blanca sostiene que sus participaciones están en un fideicomiso administrado por sus hijos, críticos como Warren han planteado que la ley podría facilitar el uso de criptomonedas como canal de influencias políticas y comerciales.
Un apoyo inusual entre demócratas y republicanos
A pesar de las tensiones habituales, la Ley GENIUS obtuvo respaldo bipartidista. Legisladores de ambos partidos coincidieron en la necesidad de evitar que Estados Unidos perdiera su posición ante regiones como Europa y Asia, donde ya avanzan en regulaciones robustas para las monedas digitales.
Sus defensores aseguran que un entorno normativo estable fomentará la inversión institucional y la innovación.
¿Qué esperar tras su entrada en vigor?
Con la GENIUS en funcionamiento, las empresas emisoras de stablecoins deberán adaptar sus sistemas de reservas, reforzar sus protocolos de compliance y preparar reportes regulares.
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A medio plazo, el objetivo es que estas medidas fortalezcan la transparencia del mercado y atraigan capitales que actualmente ven a las criptomonedas con cierta desconfianza.