Luego de haber sido dada de alta por solo cuatro días, Carla Ballero debió ser internada nuevamente de urgencia debido a una severa complicación derivada de su reciente neumonía por estreptococo, que la mantuvo en estado grave durante mayo.
Esta vez, la figura de TV+ enfrentó un derrame pleural, una condición caracterizada por la acumulación anormal de líquido entre los pulmones y la cavidad torácica.
“Fue una complicación inesperada, un derrame de líquidos. Así que me volvieron a intubar, mucho más rápido esta vez, ya que fue una operación. Me operaron el viernes 30 de mayo y me sacaron líquido de los pulmones”, relató la exintegrante de Morandé con Compañía.
Añadió que “llegué ese viernes (a la clínica) y solo alcancé a estar cuatro días en mi casa (desde el lunes 26 de mayo)”.
“Lo más duro que ha tenido que vivir la gente que me ama”
La panelista del programa Sígueme expresó lo difícil que ha sido enfrentar este proceso: “Es lejos lo más duro que me ha pasado, lo más duro que ha tenido que vivir la gente que me ama”.
“Estar al borde de la muerte ha sido muy fuerte y tener que volver a la clínica al borde de nuevo de la misma situación fue terrible. Por eso lo guardamos en silencio, porque la verdad no teníamos ya energía para más”, complementó.
A pesar de las dificultades, Carla se mantiene optimista. “Ha sido muy difícil, muy duro para mí, muy terrible, pero también muy sanador, muy mágico, porque te llena de buena onda, de volver a tener una buena vida, a hacer las cosas bien, a vibrar alto”, comentó.
Este sábado, compartió una imagen desde la clínica junto a su hijo menor, Mateo. “Ya, gracias a Dios, estoy saliendo nuevamente, con todas mis fuerzas, y espero estar este lunes en casa”, declaró, adelantando que la clínica podría emitir un comunicado la próxima semana con más detalles sobre su estado.