por La Tercera
7 de junio de 2025
Para ganarle a Argentina, o cuando menos para complicar al campeón del mundo, la Roja requería una actuación sin fallas. Ni individuales ni colectivas. El nivel de la escuadra de Lionel Scaloni en ambas categorías obligaba a extremar precauciones futbolísticas. De hecho, el gol de Julián Álvarez, que desniveló el marcador, fue una muestra de que cualquier desajuste costaría caro.
Sin embargo, como suele pasar en toda Sudamérica, en el Estadio Nacional también operó una táctica paralela a la que dispuso, sin éxito, Ricardo Gareca: la de intentar complicarle la vida al rival. Ya en el arribo, los transandinos sufrieron por la salida del aeropuerto Arturo Merino Benítez sin la privacidad que requerían. En la ANFP afirmaron que no hubo reclamos oficiales al respecto.
Ni escondiendo las estufas: la otra táctica que no le funcionó a la Roja ante Argentina
Hubo otro intento de complicarles la vida a Lionel Scaloni y sus dirigidos. Mucho menos notorio, por cierto. Uno de esos detalles a los que se suele apelar en el fútbol sudamericano para sacar algún tipo de ventaja aunque, irremediablemente, el talento contribuye decisivamente a superarlos.
El frío era uno de los presuntos aliados de la Roja en el complejo encuentro frente al monarca planetario. A la hora del encuentro, la temperatura ambiental era de 10 grados. Sin embargo, es probable que en la intimidad del recinto la sensación térmica fuese un poco más baja.
De hecho, entre los múltiples insumos que suelen utilizarse para el bienestar de los protagonistas aparecían cuatro estufas.

La distribución
Una pizarra acrílica ubicada justo en la sala en que Ricardo Gareca ofreció la conferencia de prensa posterior al duelo daba cuenta de la distribución de los recursos. Lo llamativo, en ese sentido, era la repartición de los calefactores: dos para el camarín local (individualizado con el número uno), uno para la sala de control de dopaje y otro para los miembros de la Conmebol. Es decir, ninguno en el vestuario visitante.
Lo mismo pasó con los refrigeradores que se utilizan para mantener frescas las bebidas hidratantes: había uno en el vestuario local, otro en el del de control de dopaje, uno en el de la Conmebol y el restante en el de los árbitros. En el vestuario transandino tampoco había televisor, de lo que sí disponía el chileno.