por La Tercera
7 de septiembre de 2025
La Unión Europea condenó las últimas acciones militares de Rusia en Ucrania este domingo. El ataque fue ejecutado con más de 800 drones y causó daños en la sede de gobierno en la capital, Kiev.
El ministro de exteriores, Andrii Sybiha, señaló a través de X que el ataque provocó muertos y heridos civiles, aunque no especificó cuántos. Asimismo, afirmó que Rusia atacó las ciudades de Kiev, Odesa, Kremenchuk, Krivói Rog y Zaporiyia. “Por primera vez desde el inicio de una guerra a gran escala, Rusia dañó el edificio del gobierno ucraniano en Kiev. Esto, por sí solo, constituye una grave escalada”, advirtió.
El canciller ucraniano también hizo hincapié en que la ofensiva tuvo lugar en medio de las negociaciones que ha encabezado el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, para lograr un acuerdo de paz entre ambos países en guerra. Los líderes de Rusia y Ucrania, Vladimir Putin y Volodímir Zelenski se han negado a sostener conversaciones. Mientras que Putin argumenta que no hay un lugar más adecuado para reunirse que la Federación Rusa, Zelenski se ha negado a que el encuentro se realice allí mientras su país siga bajo ataque y ha conminado a su homólogo ruso a dialogar en Kiev.
En ese escenario, la presidenta de la Unión Europea, Ursula von der Leyen expresó: “Una vez más, el Kremlin se burla de la diplomacia, pisotea el derecho internacional y mata indiscriminadamente. Europa apoya y seguirá apoyando plenamente a Ucrania. Estamos reforzando las fuerzas armadas de Ucrania, construyendo garantías de seguridad duraderas y endureciendo las sanciones para aumentar la presión sobre Rusia. La matanza debe terminar”, sostuvo en X.
A su vez, el presidente del Consejo Europeo, António Costa, aseveró en la citada red social que “hablar de paz mientras se intensifican los bombardeos y se atacan edificios gubernamentales y viviendas: esta es la versión de Putin de la ‘paz’”.
Durante la semana entrante, se espera que la UE culmine la elaboración de las nuevas sanciones contra Rusia por la guerra. Entre las propuestas, que para ser aplicadas deberán contar con la aprobación de los Estados miembros, se encuentra la prohibición de importar productos rusos, medidas adicionales para las operaciones con las que Rusia evade sanciones energéticas y aumentos arancelarios.