El ex mediocampista relató una increíble anécdota en la que recuerda la sorpresa que le generó el despertar con imágenes de Minions en su cuerpo.
En entrevista con el programa Te Lo Cedo de Rodrigo Sepúlveda, Jorge Acuña relató sin filtros el impacto que tuvo el alcohol en su vida, relatando una increíble anécdota cuando militaba en Cobresal.
El exmediocampista de La Roja recuerda que en una oportunidad, tras una junta con sus compañeros de equipo, terminó con tres tatuajes que nunca supo cómo aparecieron en su cuerpo.
"No tenía idea qué mierda hacían en mi cuerpo"
Acuña comienza relatando que en una oportunidad "despierto en El Salvador, cuando jugaba en Cobresal, con tres tatuajes que no tenía idea qué mierda hacían en mi cuerpo".
"Uno que mi esposa me lo hizo borrar (se muestra la cara) y también amanecí con un minion aquí y otro acá (se toca los muslos). El minion bueno y el minion malo. En ese momento no tenía idea qué eran, jamás vi la película", agregó.
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Acuña detalla que uno está pintado con amarillo con azul y el otro morado, asegurando que "no sentí nada cuando me los hicieron".
Consultado de por qué tenían tatuajes tras una fiesta, el ex mediocampista recuerda: "Yo llevé a un tatuador, al chilote de Rancagua, a que nos fuera a tatuar a los jugadores a El Salvador, entonces fueron a mi casa varios y compramos algo para tomar y nos borramos".
"El Mota González apareció con puras estrellas en el cuerpo, entonces no fui solo yo", recordó, agregando que "dentro de eso que nos borramos, yo termino tatuando al Mota González, una cuestión espantosa".
Pablo "Mota" González fue un mediocampista formado en Universidad Católica que jugó además en equipos como Ñublense, O'Higgins, U de Conce, entre otros.