Johnny Depp se ve a sí mismo como un 'pelele de pruebas' que el movimiento #MeToo usó durante años

En 2017, la carrera de Johnny Depp iba como un tiro. El actor no solo disfrutaba de papeles en grandes franquicias como Animales fantásticos o Piratas del Caribe, sino que participaba en películas que lo conmovían y, en general, formaba parte de la "realeza de Hollywood". Entonces llegó su divorcio con Amber Heard.

El matrimonio solo duró dos años, pero la batalla legal que se desató tras la ruptura de los dos actores se extendió bastante más, incluyendo el denominado "juicio del siglo", celebrado en 2022, tras la difamación indirecta de Heard a Depp en un artículo de opinión en el Washington Post.

Las acusaciones de maltrato por parte de la actriz derivaron en una ola de controversia en torno a Johnny Depp, que fue apartado de Hollywood en gran medida en pleno auge del movimiento #MeToo —pese a que el movimiento, como tal, llevaba años existiendo, fue tras el escándalo de Harvey Weinstein cuando despuntó en la industria—.

Depp fue silenciosamente apartado de la saga Piratas del Caribe por parte de Disney, que no ha sido capaz de dar forma a una nueva película en la que Jack Sparrow no ande haciendo de las suyas. Años después, Depp perdió su papel en Animales fantásticos tras fallar un tribunal británico en favor de The Sun, el tabloide que calificó a Depp de "maltratador de esposas".

Johnny Depp no ha vuelto, porque nunca se ha marchado

En una extensa entrevista con The Times U.K., Johnny Depp se ha mostrado muy agradecido con quienes no le dieron la espalda en la industria, destacando el Festival de San Sebastián. En plena tormenta, el certamen le concedió el Premio Donostia y acogió su último largometraje como director, Modigliani, tres días en Montparnasse.

"¿Mi regreso? ¿En serio? No me fui a ninguna parte. Si tuviera la oportunidad de separarme [de la industria], no volvería jamás.

Os diré lo que duele. Hay gente, y pienso en tres concretamente, que me trató mal. Gente que estuvo en las fiestas de mis hijos y los lanzaron por los aires. Entiendo a la gente que no pudo defenderme porque lo más aterrador para ellos era tomar la decisión correcta. [...] Fui como un muñeco de prueba para el #MeToo y lo absorbí todo".

Tras el final de su batalla legal con Amber Heard, Johnny Depp va recuperando poco a poco el control de su vida. Será Satán en The Carnival at the End of Days, a las órdenes de Terry Gilliam, junto a estrellas como Jason Momoa, Adam Driver, Jeff Bridges, Asa Butterfield y Emma Laird. El actor también protagonizará Day Drinker, junto a Penélope Cruz.

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