por IGN España
8 de junio de 2025

Sauron es sin duda el villano más relevante de la Tercera Edad de la Tierra Media, pero aunque tan solo salga en unas páginas del libro y se omita (casi) por completo en la película, el Viejo Hombre-Sauce será siempre uno de mis favoritos.
Los hobbits se encuentran con este personaje poco después de salir de la Comarca, atravesando el Bosque Viejo. Como ya habrás podido adivinar, es un árbol, un sauce para ser concretos, y no le gustan nada los intrusos. Cuando los hobbits pasan frente a él, ajenos al peligro, caen presa de un poderoso hechizo de sueño. Merry y Pippin son los que tienen peor suerte, ya que se duermen apoyados al árbol, que empieza a moverse poco a poco hasta engullirlos por completo. Cuando Frodo y Sam se dan cuenta, el Viejo Hombre-Sauce había engullido casi por completo a sus amigos, así que tuvieron que reaccionar rápidamente.
El terror del Bosque Viejo
Intentaron quemar el árbol, pero al aparecer la primera llama, el Viejo Hombre-Sauce les advirtió de que si el fuego se extendía, aplastaría a sus amigos sin piedad con sus raíces. Frodo y Sam no sabían qué hacer, y Merry y Pippin casi no tenían aire, pero Tom Bombadil llegó al rescate. Haciendo uso de su misterioso e increíble poder, entonó una canción que sumió al Viejo Hombre-Sauce en un sueño profundo. Sus raíces se relajaron, y Merry y Pippin lograron huir. Luego, ya a salvo, Bombadil les cuenta que el Viejo Hombre-Sauce llevaba muchos años aterrorizando al Bosque Viejo, con su canción de sueño y su espíritu corrompido.
Peter Jackson quiso rendirle homenaje al Viejo Hombre-Sauce, pero como no tenía sentido introducirlo en el Bosque Viejo (ya que toda esa parte se omite en las películas), decidió hacerlo en el bosque de Fangorn. En la versión extendida, Merry y Pippin quedan atrapados cuando uno de los árboles de Fangorn les sorprende moviendo sus raíces. Los agarra con fuerza y los arrastra bajo tierra, pero Bárbol acude al rescate, regañando al árbol y liberando a los hobbits. No será la versión del Viejo Hombre-Sauce que todos recordamos en la novela, pero es un homenaje muy acertado que muchos lectores de El Profesor habrán reconocido al instante.