por Fayerwayer
2 de julio de 2025
Xbox vive una paradoja: mientras rompe récords de usuarios y reporta ingresos en alza, la división de videojuegos de Microsoft sigue perdiendo talento y cerrando estudios. Esta nueva oleada de despidos, que afecta a varios equipos clave, fue acompañada por un mensaje de Phil Spencer que intenta explicar por qué la bonanza financiera no es sinónimo de estabilidad laboral.
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Más despidos, más polémica
Microsoft confirmó que despedirá a cerca del 4% de su fuerza laboral global. Hablamos de unos 9.000 empleados, una parte de ellos del sector gaming.
Entre los afectados figuran desarrolladoras como Rare, ZeniMax, Turn 10, Raven Software y King, la casa de Candy Crush en Barcelona, que verá reducido un 10% de su equipo.
El impacto no es solo humano. Según Bloomberg, al menos dos juegos en desarrollo fueron cancelados: el esperado Everwild de Rare y un MMORPG secreto de ZeniMax Online Studios con nombre clave “Blackbird”, que llevaba en producción desde 2018.
El memo de Phil Spencer: “Decisiones difíciles para un futuro brillante”
En un comunicado interno, el jefe de Microsoft Gaming, Phil Spencer, reconoció la dureza de las medidas. “Estos cambios llegan en un momento en que tenemos más jugadores y juegos que nunca”, escribió. Sin embargo, defendió los recortes como parte de una estrategia para “priorizar las oportunidades más sólidas”.
Spencer sostuvo que la decisión de reducir personal busca garantizar un “éxito duradero” y que Xbox concentrará recursos en los sectores con mayor potencial. El mensaje fue claro: menos proyectos, más enfoque.
Un panorama cada vez más estrecho
Este nuevo ajuste se suma a una cadena de recortes que ha marcado la era post-Activision Blizzard. Desde enero de 2023, Microsoft ha despedido a miles de empleados en su rama de videojuegos.
La clausura de estudios como Arkane Austin y Tango Gameworks en mayo generó una ola de críticas, sobre todo tras el éxito reciente de títulos como Hi-Fi Rush.
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¿Se puede crecer despidiendo?
Lo más desconcertante del panorama es que estos recortes llegan justo cuando Xbox reporta buenos números. En el último trimestre, Microsoft registró ingresos netos por 70.100 millones de dólares y beneficios de 25.800 millones. Las ganancias suben, la bolsa sonríe… pero los despidos continúan
