por T13
20 de junio de 2025


Guillermo Oyarzún, conserje de 70 años, habló por primera vez tras el violento episodio que vivió el pasado 17 de mayo mientras trabajaba en un edificio de Vitacura. En ese entonces, fue golpeado sin provocación por Martín de Los Santos Lehmann, empresario de 32 años. Tras la golpiza, perdió la visión total en su ojo derecho.
En conversación con 24 Horas, recordó que “Yo estaba justo en la entrada del edificio cuando llega este compadre y me dice ‘no me toque’. ‘No te he tocado’, le dije yo, y siento el combo seco”. Después de estar dos semanas hospitalizado, Oyarzún sigue su recuperación en Conchalí, en compañía de su familia.

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“Yo sabía que mi ojito estaba mal, porque me miré al espejo. Me pegó en seco, a la maleta, no alcancé a hacer nada. Yo estaba fumando, él dijo que me había pedido un cigarro, pero es mentira”, dijo el conserje visiblemente afectado. “Nunca le he podido preguntar por qué me pegó”, agregó, aún consternado por la agresión.
La golpiza que sufrió y la posterior perdida en la visión de su ojo derecho, alteró completamente los planes que tenía, “Planeábamos jubilar y disfrutar la vida los dos, pero se borró”, dice María Vidal, su esposa.
Actualmente, Martín de Los Santos Lehmann, tiene medidas cautelares de firma mensual y arraigo nacional, situación que generó indignación en la familia de Oyarzún, especialmente después de que se conociera que de Los Santos, ya había sido protagonista de otros episodios de violencia, a los cuales solucionó a través de acuerdos económicos.

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Héctor Oyarzún, hijo del conserje, fue enfático: “Esta vez no le va a funcionar con nosotros. Nosotros vamos a llegar hasta la última para que este tipo esté en la cárcel”.
El 23 de junio, el imputado será reformalizado. La familia espera que se revisen las medidas judiciales y que el caso no quede impune.