Dos semanas va a cumplir el conflicto armado entre Israel e Irán, al cual se sumó Estados Unidos el pasado sábado, con el ataque a bases nucleares dentro del país islámico. En los últimos días, ha ganado conocimiento público la polémica figura del ayatolá Alí Jamenei, líder supremo iraní quien gobierna con 86 años.
Jamenei obtuvo aquel nombramiento en 1989, luego de la muerte del primer ayatolá, Ruhollah Jomeini, para el cual incluso debió existir una enmienda constitucional, debido a que tenía baja edad para asumir aquel cargo.
¿Quién es el ayatolá Alí Jamenei?
Previamente, había sido una de las figuras de la revolución islámica de 1979, la cual culminó con el derrocamiento del monarca Reza Pahlavi. Previo a eso, sobrevivió atentados en su contra, luchas en la calle y estuvo un periodo en prisión.
Alí Jamenei nació en la ciudad de Mashhad y desde pequeño fue introducido en el mundo de los estudios religiosos. De hecho, fue nombrado clérigo cuando tenía apenas 11 años.
Desde joven fue uno de los principales críticos de la Familia Real de aquel país, por lo que pronto lideraría la revolución de corte islámico.
De acuerdo a BBC una vez que la familia de Pahlavi abandonó Irán, Jomeini asumió el liderazgo político y religioso del país, nombrando a Jamenei como presidente de la nación durante 1981.
No obstante, ocho años más tarde el consejo de ancianos eligió a este último como el nuevo ayatolá, teniendo el control total sobre las decisiones de aquella nación.
Lo cierto es que el hombre tiene el poder casi exclusivo en Irán: es el líder religioso, tiene mando final sobre las decisiones del gobierno de turno, es el mandamás de las fuerzas armadas y nombra a los altos cargos del poder judicial.
Asimismo, es él quien elige a las personas que pueden aspirar al cargo de presidente de Irán, así como otros cargos de representación popular.
Los reportes sostienen que el ayatolá tuvo seis hijos en su matrimonio, aunque ninguno de ellos puede sucederlo en el cargo. Su estima que el mayor, llamado Mojtaba Jamenei, influye bastante en las decisiones de su padre.
Los últimos años del ayatolá Jamenei no han sido fáciles. De hecho, en 2022 Irán vivió fuertes protestas internas, a raíz de la muerte de una joven llamada Mahsa Amini, a menos de la Policía de la Moral de ese país.
Lo anterior dio paso a revueltas en las principales ciudades y centros urbanos, las cuales fueron reprimidas con bastante brutalidad. Sin ir más lejos, organismos de Derechos Humanos cifraron en 550 las muertes de civiles.
Junto con eso, de acuerdo al medio asociado RFI, aquellas movilizaciones habrían dado paso a una sensación de hastío, mayoritariamente en la población joven, hacia el régimen iraní y las restricciones hacia mujeres.
“Muchos iraníes quieren que termine la república islámica. Pero la mayoría no quiere que esto se logre a costa de sangre y guerra”, expuso la analista Holly Dagres, asociada senior del Washington Institute.
