por ComputerHoy
9 de junio de 2025
Todos esos chips que actualmente hacen funciones móviles, ordenadores y más funcionan con un sistema muy simple y es el famoso código binario, que solo entiende ceros y unos, apagado o encendido.
La novedad ahora es que China acaba de dar un paso gigante hacia adelante y ha empezado a producir el primer chip de inteligencia artificial que no se limita a esos 0 y 1, sino que usa un sistema más flexible y eficiente.
Contextualizando, un grupo de investigadores de la Universidad de Beihang en Pekín, ha creado un chip que combina la lógica binaria de siempre con algo llamado lógica estocástica, que básicamente trabaja con probabilidades, no solo con certezas absolutas.
Esto permite que el chip sea mucho más tolerante a errores y consuma menos energía, perfecto para aplicaciones como pantallas táctiles, sistemas de vuelo o navegación de aviones, donde la precisión y la eficiencia son vitales.
En cuanto a qué tiene de especial esta mezcla que acaban de hacer, lo cierto es que han conseguido poner fin a dos de los grandes problemas de los chips de ahora. Primero, el 'muro del consumo energético' y es que, aunque el sistema binario es muy bueno para manejar información, gasta mucha electricidad.
Segundo, el 'muro de la arquitectura'. Los chips nuevos que no usan silicio o que tienen diseños diferentes no se llevan bien con los sistemas tradicionales, por lo que es casi tarea imposible su integración y uso de forma masiva.
El chip chino por fin supera esas barreras gracias a su sistema híbrido, llamado Hybrid Stochastic Number (HSN), que combina números binarios con números basados en probabilidades. Dice adiós al enorme consumo energético, a la vez que permite que el chip maneje información de forma más inteligente.
En cuanto a su uso, aunque suene muy técnico o lejano, pero en realidad tiene consecuencias directas para todos. Para los usuarios, significa que en unos años podríamos tener dispositivos más potentes, que duren más y que sean más eficientes energéticamente.
Tan solo piensa en móviles que no se calientan, coches autónomos mejorados o incluso electrodomésticos inteligentes que consumen menos electricidad. Sin embargo, y como siempre pasa, esto proviene de China, así que, seguramente, haya problemas para llevar esto a todo el mundo.
China da un giro de 180 grados a la tecnología con su primer chip de IA que va más allá del 0 y el 1
De lo que no cabe duda, llegue o no a Europa, por ejemplo, es que esta novedad suma puntos para esa independencia que el gigante asiático busca. La idea es no depender de nadie y poder competir de tú a tú con las grandes potencias tecnológicas. Con esto da un paso más.
Sin embargo, la tecnología de chips es uno de los frentes más complicados y tensos en la competencia global entre China y Estados Unidos. Las sanciones y restricciones impuestas por EEUU buscan precisamente frenar el avance chino, pero estos avances demuestran que Pekín está encontrando caminos diferentes e incluso mejores para no quedarse atrás.
El chip no binario es solo una parte y China también está invirtiendo en materiales alternativos al silicio, en nuevas arquitecturas de procesadores y en la producción masiva de chips de nodos maduros, que aunque no sean los más avanzados, son muy necesarios para la mayoría de dispositivos del día a día.
Su secreto no son solo los chips ni la IA, sino máquinas que trabajan día y noche
Sin ir más lejos, también ha puesto en marcha su verdadero as bajo la manga: robots industriales masivos equipados con IA.
En fábricas de coches, talleres metalúrgicos y plantas de electrónica, estos robots están provocando un giro de 180 grados la producción. El resultado con costes más bajos, calidad y precisión de cirujano y una ventaja imposible de arrebatar frente a los aranceles de Trump o las restricciones de la Unión Europea.
Yendo a los datos, China tiene más robots por cada 10.000 trabajadores que EEUU, Alemania o Japón, solo superada por Corea del Sur y Singapur. Pero cuidado, porque aquí no se está hablando de máquinas simples. Estos robots aprenden, se adaptan y trabajan 24/7.
Tal y como cuenta The New York Times, Carrie Li, diseñadora de una de estas compañías, usa IA para crear interiores de coches analizando millones de combinaciones de materiales en segundos. Mientras, en Pekín, 20 robots humanoides participaron en una media maratón. Solo seis terminaron, pero China ha dejado muy claro que las capacidades de sus robots son asombrosas.
Y esto es una carrera que no tiene fin y el propio país asiático no quiere que otro acabe adelantándole. Por este motivo, el gobierno obliga a empresas como BYD o Huawei a probar humanoides en sus líneas de producción. El plan quinquenal de robótica ya moviliza 138.000 millones de dólares en fondos, con universidades formando 350.000 ingenieros mecánicos al año.
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Etiquetas: Inteligencia artificial, Estados Unidos, Chip, Hardware
