por ComputerHoy
5 de junio de 2025
Los coches eléctricos han llegado para quedarse, pero los conductores se siguen enfrentando a un importante obstáculo: la autonomía. Las baterías en estado sólido podrían solucionar este problema, pero los investigadores son más ambiciosos.
Toyota y otras marcas europeas como Volkswagen y Mercedes trabajan en modelos que pueden ofrecer hasta 1.000 kilómetros de autonomía con una única carga. Esta innovación llega en el mejor momento, la demanda coches eléctricos está creciendo más rápido que nunca.
Corea del Sur ha diseñado un modelo que mejora la eficiencia y autonomía de las baterías en estado sólido, algo impensable hasta la fecha. Los investigadores de la Universidad de Ciencia y Tecnología de Pohang (POSTECH) aseguran que han batido un récord en almacenamiento de energía.
La clave está en los ánodos de la batería

Imagen generada por IA
Las baterías de los coches eléctricos almacenan energía en dos partes clave: el ánodo y el cátodo. El ánodo es la parte esencial del modelo diseñado por POSTECH, primero almacena la energía durante la carga y luego la libera cuando la batería alimenta al dispositivo.
Los ánodos de las baterías tradicionales suelen estar fabricados a base de grafito, un material más estable que otros presentes en las pilas como el litio, pero con un almacenamiento de energía algo limitado.
Soojin Park y Youn Soo Kim, científicos de la Universidad de Ciencia y Tecnología de Pohang, han valorado alternativas como el silicio ya que puede almacenar más energía. ¿El problema? Este material se expande demasiado en las celdas al cargarse, lo que puede causar daños en la batería, no es la opción más segura.
Nuevo material para el ánodo de la batería
Los investigadores de la Universidad de Pohang han descartado un ánodo con una elevada concentración de silicio, es demasiado costoso y su uso implica un alto riesgo. Los científicos han diseñado un líquido aglutinante que evita la expansión de este material durante la carga.
Las baterías que utilizan ánodos de silicio pueden aprovecharse de las capacidades de este material llevando la fiabilidad al siguiente nivel. Estas pilas pueden almacenar de forma segura hasta diez veces más energía que los modelos de grafito.
Esto no es una simple mejora, el uso de este material en los ánodos de las baterías podría cambiar la industria de los coches eléctricos para siempre. Conducir un vehículo electrificado sería equivalente a repostar en coches de gasolina o diésel tradicional en cuanto a tiempo de carga.
"La investigación tiene el potencial de aumentar enormemente la densidad energética de las baterías de iones de litio mediante la incorporación de materiales anódicos de alta capacidad, ampliando así la autonomía de los vehículos eléctricos", explica Soojin Park en el estudio.
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Etiquetas: Baterias, Coche eléctrico