La Corte de Apelaciones de La Serena acogió un recurso de protección presentado por el Hospital San Pablo de Coquimbo, ordenando la vacunación de un recién nacido contra la hepatitis B, pese a la negativa de sus padres.
La vacuna forma parte del Programa Nacional de Inmunización (PNI), destinado a prevenir enfermedades graves en los menores.
Fernando Cortés, abogado del hospital, explicó que “el Hospital San Pablo de Coquimbo tiene procesos definidos en caso de negativas de los padres o cuidadores” a la inoculación, que incluyen la consejería de la matrona encargada y la remisión de antecedentes a la Secretaría Regional Ministerial de Salud.
Sin embargo, ante la gravedad del caso, el hospital decidió ir más allá de los procedimientos habituales e interponer el recurso de protección para garantizar la inoculación.
“Deber de garantizar que los derechos”
“Frente a la negativa de los padres, nuestros equipos tienen el deber de garantizar que los derechos del recién nacido se cumplan, velando en todo momento por su salud e integridad”, agregó Cortés.
Además, destacó que el PNI administra la vacuna “a todos los recién nacidos, sin importar su estrato o su condición”, subrayando la importancia de proteger al menor, independientemente de la decisión parental.
La Corte consideró que la negativa de los padres vulneraba el derecho a la vida e integridad física del menor, exponiéndolo a una enfermedad prevenible, y respaldó la acción del hospital para asegurar su salud.