por 24Horas
17 de julio de 2025
El primer ministro israelí asegura que la paz en la zona se logró con ataques militares, mientras Damasco atribuye la estabilidad a la mediación internacional.
El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, advirtió este jueves que la calma lograda en el sur de Siria, tras días de masacres contra la minoría árabe drusa y los bombardeos israelíes ayer contra Damasco, se logró gracias al uso de la fuerza.
"Este es un alto el fuego que... se logró con la fuerza. No con peticiones ni súplicas, sino con la fuerza. Logramos la paz con la fuerza, la tranquilidad con la fuerza, la seguridad con la fuerza, en siete frentes", dijo el mandatario en un vídeo mensaje, en el que insistió en que Israel no permitirá que tropas del nuevo régimen sirio sean desplegadas al sur de Damasco.
Netanyahu dijo, además, que existe una política clara respecto al país vecino: desmilitarizar la zona al sur de Damasco, "desde los Altos del Golán hasta las montañas drusas", así como "proteger a los hermanos de nuestros hermanos", en referencia a los drusos al otro lazo del territorio de los Altos del Golán ocupado por Israel desde 1967.
"Ambas líneas fueron violadas por el régimen de Damasco. Envió un ejército al sur de Damasco, a la zona que debía estar desmilitarizada, y comenzó a masacrar a los drusos. No podíamos aceptar esto de ninguna manera", añadió.
Israel atacó a las tropas sirias que se dirigían al sur, pero también bombardeó ayer el Ministerio de Defensa y las inmediaciones del Palacio Presidencial en Damasco, en una escalada que solo horas después retornó a la calma.
El presidente sirio, Ahmed al Sharaa, anunció este jueves el "éxito" de los esfuerzos para frenar el estallido de violencia en la provincia meridional de Al Sueida, cuya seguridad dejará en manos de facciones locales y líderes religiosos.
"Los esfuerzos del Estado por restablecer la estabilidad y expulsar a las facciones proscritas han tenido éxito (...) Gracias a la eficaz intervención de la mediación estadounidense, árabe y turca, se salvó a la región de un destino incierto", sentenció el presidente en un discurso televisado.
En este sentido, explicó que han decidido dejar la seguridad de Al Sueida en manos de facciones locales y líderes religiosos, después de que la llegada de las fuerzas gubernamentales para hacerse cargo de esas tareas desatara el martes intensos choques entre estas y grupos de la zona; a los que se sumó Israel.
"Nos enfrentábamos a dos opciones: abrir una guerra con la entidad israelí a expensas de nuestro pueblo druso y de su seguridad, desestabilizar Siria y toda la región. O permitir a los sheijs drusos y eruditos que entraran en razón y dieran prioridad al interés nacional", sentenció durante su intervención Al Sharaa.