por 24Horas
11 de agosto de 2025
Entre notificaciones constantes y la tentación de estar siempre en línea, aparecen conductas que pueden deteriorar la calidad de las relaciones humanas.
En la era de la hiperconectividad, el celular se convirtió en un protagonista indiscutido de la vida diaria. El acceso ilimitado a internet ofrece comodidad, información al instante y comunicación inmediata, pero también ha dado lugar a dinámicas o conductas que pueden deteriorar la calidad de las relaciones humanas.
Y es que entre notificaciones constantes y la tentación de estar siempre en línea, la capacidad de autocontrol se ve puesta a prueba.
En medio de esas conductas, el phubbing aparece como un fenómeno cada vez más frecuente que cuestiona cómo el estar "en línea" de manera constante altera la relación con los demás.
UNA NUEVA FORMA DE DESCONEXIÓN
El término phubbing surge de la combinación de las palabras del inglés "phone" (teléfono) y "snubbing" (despreciar, desairar o ignorar) y define una situación cotidiana: ignorar a una persona presente para prestar atención al celular.
Si bien esta práctica era asociada a los adolescentes y entornos laborales, ya no es exclusiva, pues se extiende a casi todos los ámbitos sociales, etarios y de relaciones interpersonales, y uno los factores más potentes por los que ocurre es el temor al FOMO (Fear of Missing Out), que es el miedo a perderse situaciones o eventos, principalmente, en las redes sociales.
En el caso de las parejas, según consignó La Tercera, el phubbing podría ocurrir por distintos motivos, entre ellos, como una forma de evitar conversaciones no deseadas, incomodidad o manifestar malestar con una situación concreta.
"(El phubbing) claramente va en aumento y es necesario conversarlo en nuestras casas para poner un mejor clima, con mayores indicadores que hablen de la sana comunicación que debiese darse en la familia y parejas de hoy en día", indicó al medio citado Carla Mendoza Nuñez, coordinadora de la Unidad Clínica del Centro de Psicología Aplicada de la Universidad de Talca.
"Es algo dramático"
Mientras que Francisca von Teuber, psicóloga de Clínica Universidad de los Andes, advirtió que "es un fenómeno que todos estamos observando cada vez con mayor frecuencia en los contextos de interacción personal y abundan los reclamos al respecto (...) que los padres estén tomados por las pantallas es algo dramático o que descuiden el uso de las pantallas que hacen sus hijos para descansar de sus demandas, es preocupante".
Mendoza explicó que, desde la mirada de la neurociencia, esto puede obedecer a una intención: hacer sentir al otro cosas como "me puedo entretener solo/a", "no te necesito" o "tengo otros intereses más importantes que estar contigo".