por Fayerwayer
23 de junio de 2025
Cuando Dragon Ball Super: Broly reinventó al legendario super saiyajin y lo metió de lleno en el canon, los fans celebraron como si Goku hubiese alcanzado un nuevo nivel de poder. Y con razón. Ya no era solo un bruto con músculos; Broly se convirtió en un personaje trágico y emocionalmente complejo.
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Pero el verdadero regalo fue abrir la puerta para que otros favoritos “no oficiales” puedan seguir el mismo camino.
Y es que si Broly y Gogeta (¡por fin!) lograron entrar al canon, ¿por qué no otros? Hay un montón de personajes de películas antiguas, videojuegos y spin-offs que se han ganado un lugar en la historia principal, ya sea por diseño, historia o simple carisma. Aquí van seis nombres que merecen ese upgrade oficial.
Cooler: el regreso del hermano mayor que podría poner en jaque a Freezer
Cooler es uno de esos villanos que, sin ser canon, siempre ha sido parte de la conversación. Más frío (literal y figuradamente) que Freezer, su poder y su forma metálica dejaron huella. Imagínate un reencuentro entre hermanos, pero con menos abrazos y más destrucción planetaria.
¿Lo mejor? Cooler tiene una historia lista para expandirse: puede volver con sed de venganza, tal vez con una nueva transformación, y ser una amenaza tan grande que obligue incluso a Freezer a trabajar con Goku y Vegeta. Sí, así de loco.
Lord Slug: el Super Namekiano que podría dar más pelea de lo que recuerdas
Ok, no todos lo tienen fresco en la memoria, pero Lord Slug fue básicamente un Piccolo malo con esteroides. Un Super Namekiano con complejo de dictador galáctico. ¿La Tierra? Su próxima conquista. ¿Los Guerreros Z? Estorbos menores.
Con Piccolo volviendo a escena en Dragon Ball Super: Super Hero, sería el momento perfecto para traer a Slug con una actualización. Una rivalidad namekiana como se debe. Piccolo necesita enemigos que no sean solo comparsas.
Towa y Mira: los archienemigos perfectos para una secuela de DAIMA
¿Te suenan de Xenoverse o Super Dragon Ball Heroes? Towa y Mira no solo tienen diseños brutales, sino también una conexión directa con el Reino Demonio y Dabura, lo que los hace perfectos para continuar la historia de DAIMA.
Además, jugar con las líneas temporales es su especialidad, lo cual siempre le da un toque caótico a todo.
Turles: el Goku malvado que en realidad no es Goku (pero todos lo pensamos)
Turles es básicamente Goku si hubiera tomado decisiones horribles y se hubiera obsesionado con un árbol que se alimenta de planetas. Su vuelta al canon sería un bombazo, no solo por la nostalgia, sino porque plantea un conflicto bien interesante: ¿qué pasa si el héroe debe enfrentarse, literalmente, a su reflejo más oscuro?
Fu: el científico loco que podría romper el multiverso por pura curiosidad
¿Villano? ¿Aliado? ¿Agente del caos con intenciones cuestionables? Fu es todo eso y más. Mitad genio, mitad troll, este personaje brilla por lo impredecible que es. Ya salvó a Bardock una vez, solo para ver qué pasaba.
En un universo como el de Dragon Ball Super, donde el tiempo y el espacio son cada vez más flexibles, Fu podría ser el comodín que lo desordena todo… para después intentar arreglarlo. O no.
Janemba: el demonio sin alma que pide a gritos una historia digna
Janemba es todo lo que te gusta de un villano visualmente impactante, pero con cero profundidad narrativa. Su diseño está listo para brillar otra vez, pero necesita una historia más sólida.
Si lo conectan con el Reino Demonio, como parece lógico tras DAIMA, podrían reinventarlo como una amenaza cósmica mucho más interesante que el simple monstruo que fue.
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En resumen, el mundo de Dragon Ball Super está lleno de posibilidades no explotadas, y estos seis personajes son solo la punta del iceberg. Si Broly logró dar el salto, ellos también pueden… y deberían.
