por IGN España

20 de junio de 2025

En un nuevo post en el blog oficial de PlayStation, el co-director creativo de Sucker Punch Productions, Nate Fox, ha compartido una mirada más detallada sobre los viajes que hizo el equipo de Ghost of Yotei a Japón para investigar y buscar referencias culturales. Siguiendo la línea de su anterior contribución al blog de PlayStation (más información aquí), Fox volvió a insistir en el compromiso del equipo de retratar el Japón feudal de forma respetuosa, centrándose esta vez en los esfuerzos realizados para representar la cultura de los ainu.

Conociéndolos de cerca

Los ainu son un pueblo indígena del norte de Japón, especialmente de la isla de Hokkaido, la más septentrional del país, donde se sitúa Ghost of Yotei. Su lengua, cultura, creencias y tradiciones son claramente diferentes de las de los yamato (también conocidos como wajin), el principal grupo étnico que constituye la abrumadora mayoría de la población japonesa actual.

Ghost of Yotei se sitúa en un momento crucial de la historia: 1603 fue el año en que Tokugawa Ieyasu, uno de los grandes unificadores de Japón, instauró el shogunato Tokugawa, poniendo fin a décadas de guerras civiles. Edo (actual Tokio) se convirtió en el centro del poder japonés, dando paso al pacífico periodo Edo en el que florecieron la cultura y la sociedad japonesas. Sin embargo, en esa época, Hokkaido seguía siendo una isla salvaje y escasamente poblada, hogar de los ainu, cuya formidable nieve invernal y paisaje escarpado la convertían en un lugar difícil para vivir.

"Al ambientar un juego en Hokkaido, sabíamos que un elemento crucial era hacer todo lo posible por representar la cultura ainu de manera respetuosa", explica Nate Fox. "Por suerte, habíamos contactado con una asesora cultural ainu antes de emprender nuestro viaje de recopilación de referencias". No sólo eso, sino que la asesora les invitó a conocer a su familia, quienes llevaron al equipo de Ghost of Yotei a buscar verduras en las montañas. "Fue una forma maravillosa de hacer nuevos amigos y empezar nuestro viaje de aprendizaje sobre la cultura ainu. Esa noche decidimos incluir la búsqueda de comida en nuestro nuevo videojuego, queríamos que los jugadores pudieran compartir (nuestra) experiencia".

Según Fox, el equipo de Ghost of Yotei pasó parte de su viaje de investigación en la península de Oshima, la parte sur de Hokkaido más cercana a la isla principal japonesa de Honshu. En el siglo XVII, era el dominio del clan Matsumae, al que el gobierno Tokugawa concedió derechos exclusivos para comerciar con los ainu que vivían más al norte. Fox observó que aún hoy hay indicios de que los japoneses continentales de la época rara vez vivían más al norte de Oshima. Hay una "proliferación de cerezos en la península, traídos de Honshu, pero poco comunes en el resto de la isla. Eso nos cuenta realmente la historia de lo poco poblada que estaba Hokkaido en 1603 por los wajin", señala.

"Hemos intentado imitar esa característica en el juego, apoyándonos en zonas de naturaleza salvaje entre las granjas". Esta agreste naturaleza servirá de telón de fondo para la búsqueda de la protagonista, Atsu, de venganza contra los que mataron a su familia.

Fox y el equipo también visitaron el Museo Ainu de Nibutani con su asesor cultural. Las casas tradicionales ainu (llamadas cise) difieren de las casas tradicionales japonesas. La visita al museo "nos ayudó mucho a hacernos una idea del tipo de objetos que veríamos en el juego y cómo se usaban".

Podemos echar un vistazo al interior de una casa ainu, con su gran chimenea central, en el tráiler oficial de la fecha de lanzamiento de Ghost of Yotei (alrededor de los 2 minutos de trailer). La mujer con la que habla el protagonista, Atsu, en esta escena parece ser ainu, ya que tiene un tatuaje en el labio. Este símbolo de belleza para los ainu sería posteriormente reprimido por el gobierno japonés a finales del siglo XIX, después de haberse anexionado totalmente Hokkaido (fuente de la información: Embajada de Japón del Reino Unido). Para entonces, las medidas para obligar a los ainu a abandonar su lengua y cultura e integrarse en la sociedad japonesa estaban en pleno apogeo.

(Como nota al margen, el relato de J.K Goodrich de 1888 sobre las casas ainu ofrece una imagen de primera mano del contraste y las complicadas relaciones entre ainus y japoneses en aquella época).

Fox también se refirió al tiempo que el equipo de Ghost of Yotei pasó aprendiendo sobre el Japón del período Edo, que les llevó a Nikko Toshogu, uno de los santuarios de Japón dedicados al shogun unificador Tokugawa Ieyasu, iniciador del periodo Edo. "Allí obtuvimos la bendición para el juego de la deidad consagrada, Tokugawa Ieyasu", explica Fox, y añade que exhiben con orgullo en el estudio el ema (placa de madera) y el omamori (amuleto protector) que obtuvieron de Nikko Toshogu como recuerdo de su viaje.

Reflexionando sobre el viaje de investigación, Fox explicó que "aunque nuestra versión de Hokkaido es ficticia, la sensación de autenticidad que nos esforzamos por crear tiene sus raíces en esas experiencias del mundo real". Será interesante ver cómo Ghost of Yotei retrata el contraste entre la cultura Wajin/Edo y la de los ainu.