por ComputerHoy
3 de julio de 2025
¿Pueden espiarte en un piso turístico con cámaras? Esta situación, llevada al extremo, se ha visto en algunas películas últimamente. Un grupo de amigos van a una cabaña en mitad de ninguna parte, y no se dan cuenta de que en realidad están siendo observados por alguien. Al ser una película de terror, todo termina en un baño de sangre, claro, como es natural.
En la vida real, afortunadamente, las cosas no llegan a tal punto. Pero incluso así, a nadie le gusta perder la privacidad a menos de un desconocido, es una situación muy incómoda. La gran pregunta es, ¿puede hacerlo el dueño de un apartamento o una casa? ¿En qué casos resulta legal? La legislación al respecto puede ser algo liosa, por lo que conviene tenerla más o menos clara.
Las cámaras espías, una amenaza en los pisos turísticos
Aunque pueda parecer una exageración propia del cine, no lo es. De un tiempo a esta parte se han dado numerosos casos en los que pisos turísticos contaban con cámaras de seguridad, para observar qué hacían sus inquilinos. Incluso se han encontrado estos dispositivos escondidos en los sitios más recónditos: enchufes, lámparas o detectores de humo. Cualquier lugar vale.
Para muestra, están las investigaciones. En 2023, sin ir más lejos, un estudio de la Universidad de Queen Mary de Londres reveló que 1 de cada 10 usuarios de plataformas de alquiler vacacional había tenido la sospecha o la certeza de haber sido grabado sin su consentimiento. Y lo peor de todo es que no es ilegal hacerlo… siempre y cuando se cumplan algunos requisitos concretos.
Hay que empezar por tener claro que, aunque alguna gente no lo sepa, plataformas como Airbnb permiten las cámaras de seguridad. Eso sí, no de cualquier manera. Por ejemplo, deben estar visibles (nada de permanecer escondidas sabe Dios dónde) y nunca ubicadas en sitios privados, como el dormitorio o el cuarto de baño. Aunque estando de vacaciones, ¿acaso lo demás es menos indiscreto?
Lo que resulta determinante, en cualquier caso, es el hecho de que siempre que haya una cámara de vigilancia en un piso de alquiler, debe notificarse. Es decir, ponerlo en el anuncio. Así, la gente al final es quien tiene la oportunidad de decidir si le importa o no renunciar a cierto grado de privacidad. Aunque no hace falta ser un genio de la psique humana para saber qué elegiría la mayoría.
Buscar cámaras ocultas, como una aguja en un pajar
Lo complicado del asunto es que, si alguien esconde una cámara de vigilancia en un piso turístico, encontrarla no es tarea fácil. La tecnología ha permitido que lo que antes parecía limitado a las películas de espías, ahora esté al alcance de casi cualquiera. Algunos expertos recomiendan revisar el piso en busca de ellas antes de nada… como si fuera una tarea sencilla.
Hoy en día una cámara puede ocultarse casi en cualquier parte, desde un reloj de pared hasta el marco de una foto, una figura aparentemente decorativa o un cargador USB. Buscarla sería como intentar encontrar una aguja en un pajar. Además, ¿quién quiere pasarse tiempo de sus vacaciones haciendo eso? La cuestión es complicada y, por qué no reconocerlo, un poco inquietante.
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Etiquetas: Vacaciones