“Ne fodias vita functi contagio requescunt MDCCXCIII”.

Es una de las tantas islas que existen en el mundo, pero tiene una particularidad: Es considerada como un lugar de muerte.

Poveglia es un terreno de no más de 350 metros de largo y de ancho, ubicado a metros de uno de los lugares turísticos más populares de Italia, Venecia.

Sin embargo, la isla no tiene la misma fama que su vecina, o quizás sí, pero no por sus lujos y turismo, sino más bien por un triste legado, maldito según algunos.

Un territorio edificado, donde sus muros fueron testigos de episodios oscuros de la historia.

Fue utilizada como estación de cuarentena, cuando la peste negra azotó europa y más tarde sus dependencias fueron ocupadas por un psiquiátrico.

Las leyendas aseguran que miles de cuerpos fueron enterrados en su terreno. Lo que generó una serie de mitos sobre fantasmas y leyendas.

Actualmente, por el peligro que las ruinas significan, la entrada está prohibida y la isla es custodiada por la policía.

Sin embargo, basta con leer el letrero que tiene en su entrada -y cuya frase encabeza esta nota- que lo deja claro: “No desentierres la vida, el contagio muerto resurgirá”.