por La Tercera
17 de julio de 2025
En una reforma electoral histórica, el gobierno británico anunció el jueves que planea dar a los jóvenes de 16 y 17 años el derecho a votar en todas las elecciones de Reino Unido. Según Sky News, se trata de la mayor reforma del sistema electoral desde 1969.
El gobierno dijo que los cambios propuestos eran parte de un esfuerzo para aumentar la confianza pública en la democracia y alinearían los derechos de voto en todo Gran Bretaña, donde los votantes más jóvenes ya participan en elecciones descentralizadas en Escocia y Gales.
“Tienen edad suficiente para salir a trabajar, tienen edad suficiente para pagar impuestos... y creo que si contribuyen, deberían tener la oportunidad de decidir en qué quieren gastar su dinero, qué camino debe seguir el gobierno”, declaró el primer ministro laborista Keir Starmer al canal ITV News.
En varios países ya se permite votar a los 16 años, como Austria, Malta y Brasil, mientras que en Grecia la edad para votar está fijada en 17 años. Otros permiten a los jóvenes de 16 años participar solo en algunas elecciones: en Alemania y Bélgica, pueden participar en la elección de miembros del Parlamento Europeo, pero no pueden votar en las elecciones federales. Gran Bretaña se encuentra en esa categoría: las elecciones para los Parlamentos independientes que controlan muchas áreas políticas en Escocia y Gales ya establecían una edad para votar de 16 años, apunta The New York Times.

Según el diario The Guardian, el paquete de reforma parece estar tomando medidas para fomentar un mayor registro de votantes. El gobierno afirmó que adoptaría un sistema de registro de votantes cada vez más automatizado que reduciría la necesidad de completar datos en diferentes servicios gubernamentales en múltiples ocasiones.
El cambio en Gran Bretaña requerirá la aprobación parlamentaria, pero es poco probable que eso represente un obstáculo porque esta medida fue parte de la campaña electoral de Starmer el año pasado que le dio una gran mayoría.
A pesar de esa victoria, la popularidad de Starmer ha caído drásticamente en el gobierno tras una serie de tropiezos en un contexto económico difícil. Su partido ocupa el segundo lugar en la mayoría de las encuestas de opinión, por detrás del partido de extrema derecha Reform UK de Nigel Farage.
Una encuesta a 500 jóvenes de 16 y 17 años realizada por Merlin Strategy para ITV News mostró que el 33% dijo que votaría por el Partido Laborista de Starmer, el 20% por el Partido Reform UK, el 18% por el Partido Verde, el 12% por los Demócratas Liberales y el 10% por los Conservadores.
Una encuesta de YouGov a 5.538 adultos realizada en las horas posteriores al anuncio del jueves encontró que el 57% de los británicos piensa que los jóvenes de 16 y 17 años no deberían poder votar, mientras que un tercio (32%) dice que sí deberían.
Según datos oficiales, citados por Reuters, en Reino Unido hay aproximadamente 1,6 millones de jóvenes de 16 y 17 años. Poco más de 48 millones de personas pudieron votar en las últimas elecciones, en las que la participación alcanzó su nivel más bajo desde 2001. Las próximas elecciones se celebrarán en 2029. La última vez que se modificó la edad para votar fue en 1969, cuando se redujo de 21 a 18 años.
Hay algunas señales preocupantes, señala The New York Times. La participación en las elecciones generales de 2024 fue del 59,7%, la más baja desde 2001 y 7,6 puntos porcentuales menor que en las elecciones generales anteriores de 2019. “Nuestra democracia está en crisis y corremos el riesgo de llegar a un punto crítico en el que la política pierda su legitimidad. El gobierno ha captado claramente estas señales de alarma”, declaró Harry Quilter-Pinner, director ejecutivo del Instituto de Investigación de Políticas Públicas, una organización de tendencia izquierdista.
El Partido Conservador británico, el segundo más grande en el Parlamento, pero que se ha quedado aún más atrás de sus rivales desde que perdió el poder el año pasado, dijo que las reformas se estaban implementando apresuradamente sin la consulta adecuada y eran inconsistentes para los jóvenes.
“Los jóvenes de 16 años podrán votar en las elecciones, pero no presentarse como candidatos, y podrán votar, pero no podrán comprar un billete de lotería, consumir alcohol, casarse ni ir a la guerra. Esta es una política extremadamente confusa”, declaró el diputado Paul Holmes, portavoz conservador para asuntos comunitarios.
Las investigaciones realizadas en otros países han demostrado que reducir la edad para votar no tuvo ningún impacto en los resultados electorales, pero que los jóvenes de 16 años tenían más probabilidades de votar que aquellos que adquirieron la edad para sufragar por primera vez a los 18 años.
“Votar a los 16 años también ayudará a más jóvenes a emitir ese voto tan importante y adictivo en un momento en el que pueden recibir apoyo mediante educación cívica”, dijo Darren Hughes, director ejecutivo de la Sociedad para la Reforma Electoral.
“Durante demasiado tiempo se ha dañado la confianza pública en nuestra democracia y se ha permitido que la fe en nuestras instituciones disminuya”, comentó la viceprimera ministra, Angela Rayner.
“Estamos tomando medidas para derribar las barreras a la participación que garantizarán que más personas tengan la oportunidad de participar en la democracia de Reino Unido, apoyando nuestro plan de cambio y cumpliendo nuestro compromiso manifiesto de dar a los jóvenes de 16 años el derecho a votar”, añadió.
Donaciones extranjeras
Para enfrentar la interferencia extranjera, el gobierno planea endurecer las normas sobre las donaciones políticas, incluyendo controles a las contribuciones superiores a 500 libras (670 dólares) provenientes de asociaciones no incorporadas y cerrando las lagunas legales utilizadas por las empresas fantasmas.
Al mismo tiempo, también habrá multas más severas, de hasta 500.000 libras (670.000 dólares), para aquellos que infrinjan las reglas, y cualquier declaración falsa o engañosa constituirá un delito penal.

Los partidos políticos deberán evaluar a las empresas de las que reciben donaciones mediante una serie de pruebas, demostrando su conexión con Reino Unido o Irlanda. El gobierno dijo que reforzaría los controles sobre algunas donaciones y evitaría que un donante extranjero estableciera una empresa fantasma en Gran Bretaña para canalizar dinero a un partido político.
Actualmente, cualquier empresa de Reino Unido puede hacer donaciones a un partido político, independientemente de cuándo se creó, de dónde proviene su dinero y quiénes son sus propietarios.
Algunos activistas habían pedido reformas más radicales después de que el multimillonario estadounidense Elon Musk lanzara la idea de donar 100 millones de dólares a Reform UK, un plan que ahora parece haber abandonado después de las tensiones con el líder del partido, Nigel Farage.
Como ciudadano extranjero, no podría donar bajo las nuevas reglas y tendría que demostrar que cualquier donación realizada a través de una empresa con sede en Reino Unido tuvo ingresos generados en el país.
También se reforzarán las verificaciones de “conozca a su donante”, lo que significa que los partidos deberán considerar el riesgo de que cualquier dinero provenga de fuentes ilegítimas. La Comisión Electoral proporcionará nuevas directrices para la realización de estas evaluaciones de riesgo.