por Hipertextual
11 de agosto de 2025
A Windows 10 le quedan apenas un par de meses de soporte oficial, y es un hecho que muchos usuarios no piensan actualizarse a Windows 11 por más que ya no reciban actualizaciones ni parches de seguridad. Pero algunos han optado por ir un paso más allá para demandar a la compañía de Redmond y así evitar que la finalización del soporte se concrete en la fecha estipulada.
Tal es el caso de Lawrence Klein, quien ha presentado una demanda contra Microsoft ante un tribunal de California. El susodicho afirma que el cese del soporte de Windows 10 viola el Código de Negocios y Profesiones y la Ley de recursos legales para consumidores del citado estado.
Klein sostiene que lo único que persigue Microsoft con el fin del soporte de Windows 10 es impulsar la venta de nuevos ordenadores con IA. Tengamos en cuenta que los Copilot+ PC están optimizados para ejecutar características de inteligencia artificial gracias a la implementación de una unidad de procesamiento neuronal o NPU. Entre tantas, la polémica memoria fotográfica Recall.
Lo que la demanda objeta es que Microsoft haya decidido finalizar el soporte de Windows 10 cuando todavía era la versión más usada de su sistema operativo, y con bastante diferencia.
"La decisión de Microsoft de suspender el soporte para Windows 10 mientras la mayor parte de su base de consumidores aún lo usaba, formaba parte de su estrategia más amplia para obligar a sus clientes a adquirir nuevos dispositivos optimizados para ejecutar el paquete de software de inteligencia artificial (IA) generativa de Microsoft, como Copilot, incluido por defecto con Windows 11 [...]
La estrategia de Microsoft consistía en aprovechar su posición dominante en el mercado de sistemas operativos para lograr una posición dominante en el mercado de la IA generativa. Para ello, ha obligado a los clientes a comprar nuevos dispositivos (o a afrontar repercusiones financieras en caso de no hacerlo) y a utilizar Windows 11, asegurando así una amplia base de usuarios con acceso a este producto por defecto".
Fragmento de la demanda contra Microsoft.
Microsoft afronta una demanda por cortar el soporte de Windows 10
El soporte de Windows 10 llegará a su fin el 14 de octubre de este mismo año. Una decisión que causó malestar entre el público desde que se anunció formalmente en 2020. Y ese sentimiento se exacerbó tras la mala recepción inicial que tuvo Windows 11 tras su debut en 2021.
Windows 10 llegó en 2015 y se convirtió rápidamente en el sistema operativo de Microsoft más usado, cosechando excelentes críticas de parte de los usuarios. Su pico de popularidad se dio en diciembre de 2021. Por entonces, llegó a acumular casi el 83 % de la cuota de mercado entre las diferentes plataformas de la compañía de Redmond.
Durante los primeros dos años de disponibilidad de Windows 11, los usuarios dejaron en claro que no estaban interesados en abandonar Windows 10. En septiembre de 2023, el software de 2015 todavía acumulaba más del 70 % del marketshare. Microsoft emprendió campañas bastante agresivas para instar al público a cambiarse a la versión más moderna, pero tampoco dio los resultados esperados.
Recién en julio de este año, Windows 11 pudo superar a su predecesor para convertirse en el SO de escritorio más usado del mundo. Aun así, al día de hoy Windows 10 sigue instalado en más del 42 % de los PC activos. Esto es parte de la justificación de Klein para su demanda contra la firma que dirige Satya Nadella.
Lo que el demandante reclama principalmente es que Microsoft siga ofreciendo soporte a Windows 10 sin coste adicional hasta que la cantidad de ordenadores que lo utilicen represente menos del 10 % del total de usuarios de Windows. En su defecto, que la compañía simplifique los requisitos de hardware para permitir que más PC ordenadores puedan actualizarse.
También solicita que se ordene la provisión de actualizaciones de seguridad extendidas sin coste adicional. No olvidemos que los consumidores pueden pagar 30 dólares por ordenador para extender los parches por un año más. Las organizaciones pueden optar por extenderlas por más tiempo, pero cada renovación será más costosa.